“Benediction”
Nueva película de Terence Davies, una eminencia del cine británico.
Es un biopoic sobre Siegriedd Sassoon, poeta británico que experimentó como soldado la Primera Guerra Mundial. A través de su poesía se nos narran los horrores de vivir ese acontecimiento, mientras debe luchar consigo mismo y con una sociedad conservadora, para entender y aceptar su homosexualidad. O no.
Terence Davis hace una película a su medida y gusto. No intenta ni busca espacios convencionales a los que uno suele estar acostumbrado en este género. Eso nos permite disfrutar del personaje de Sassoon desde una mirada muy peculiar y con un estilo definido. Bastante elegante. Bastante pausada. Bastante dialogada.
Esto puede jugar en contra de un ritmo ágil y ser confundido con lo tedioso. Porque esta lentitud permite a uno como espectador ir entrando en el espacio y empatizando de a pocos. La poesía y el juego con las imágenes de la guerra sirven como preludio y puente hacia el interior de Sassoon, mientras que los varios y exquisitamente escritos diálogos, nos ayudan a entenderlo de manera tangible. Ambos, apoyados por una sensacional actuación de Jack Lowden, quien es todo un descubrimiento. Su escena final, tristísima, es demoledora.
Las maneras y manías de Terence Davies, no terminan de cerrar y de permitir una película perfecta. Sin ser esto lo que busca. En cambio nos regala un texto muy personal sobre un personaje que debería promoverse más. Donde en esta historia, alcanza su punto más alto en la relación con el Dr. Rivers.
“Charlotte”
A falta de “Inu-Oh”, enigmático título que deseábamos ver y de “Where is Ana Frank?”, que se nos pasó en Cannes, “Charlotte” fue el único título animado disponible. Los otros no estuvieron en la plataforma virtual (en esta región).
En “Charlotte” seguimos a la formidable artista judía, que lleva el nombre del título y apellida Salomon, quien vivió y pereció a causa del nazismo durante la Segunda Guerra Mundial.
Si bien “Charlotte” es una carta de amor de sus dos directores, lamentablemente termina siendo convencional en su estructura y dramática a más no poder, rozando con el miserabilismo. Todo es trágico y triste, evitando instantes de desfogue o felicidad para poder continuar con la narración y asimilar lo anterior. Esto, en lugar de resultar como una muestra fehaciente del drama vivido por Charlotte, termina cayendo en lo simplista e inocuo. No afecta ni cala.
Sin mucho que destacar en su animación. Salvo alguno paisajes bellos por aquí y allá, “Charlotte” se vive como un homenaje decente y sensible, aunque olvidable. Eso sí, el arte de la protagonista merece todas las miradas y recuerdos.
The Survivor
Es la nueva película de Barry Levinson, director que tuvo su gran década (finales de los 80´s e inicios de los 90´s) con títulos como “Good Morning, Vietnam”, “Rain Man” o “Bugsy”, pero que, aunque sigue en actividad, ya no “da la talla”. “The Survivor”, sin embargo, podría volver a acercarlo a la temporada de premios. Ya veremos.
“The Survivor” es un biopic sobre Harry Haft, boxeador que debió luchar contra sus compañeros en un campo de concentración para sobrevivir. Luego de escapar y viajar a EEUU, tuvo una pequeña carrera como boxeador, donde peleó contra el famoso Rocky Marciano.
Quizás lo más destacable en “The Sruvivor” es que Barry Levinson consigue hacer una película al estilo más clásico posible. De esas tan escasas hoy en día. Donde más allá de ciertas torpezas y altibajos en sus líneas temporales y un claro desbalance en su reparto donde el protagonista se lleva casi todo el aire, esa sensación de cine de antaño se disfruta y mantiene hasta el final.
Levinson apuesta por el blanco y negro en el trágico pasado, que recuerda a “La Lista de Schindler” y a “Toro Salvaje”, así como una paleta de colores en el presente que resuena más con “Rocky”. Cine clásico.
Y más allá de tener elementos narrativos e históricos que la Academia siempre busca y premia, el trabajo de Ben Foster es buenísimo. Muy aparte de una transformación radical en peso, cara y cuerpo, apoyado por un maquillaje que lo hace irreconocible, este es definitivamente su mejor papel a la fecha. Uno que recuerda a un ya consolidado Robert De Niro o Sylvester Stallone.
