Dirección: Yorgos Lanthimos
Guión: Tony McNamara. Novela: Alasdair Gray
País: Irlanda
Reparto: Emma Stone, Ramy Youssef, Christopher Abbott, Jerrod Carmichael, Mark Ruffalo, Willem Dafoe, Kathryn Hunter, Margaret Qualley
«Poor things» o «Pobres criaturas» puede ser, objetivamente hablando, la mejor película del director griego Yorgos Lanthimos. Al margen de gustos personales, es su obra más grande y aquella donde ha podido plasmar, con todos los excesos mediante, su propio universo. Y quizás, lo más importante, es que dentro del profundo cinismo de su cine, ha encontrado su lado más humano. Uno que puede valer la pena explorar tanto o más que el que acostumbra mostrar.
En «Pobres Criaturas» seguimos a Bella (Emma Stone), quien es en un experimento al mejor estilo del Doctor Frankenstein: Una mujer adulta con un cerebro de bebé que debe aprender a vivir, descubrirse y encontrarse.
Yorgos suele deshumanizar a sus personajes. Separarlos del mundo y sus convenciones como en «Canino», reemplazar seres queridos cual objetos como en «Alps», darles personalidades robóticas y acartonadas como en el «Sacrificio del Ciervo Sagrado» o convertirlos en animales como en «La Langosta». Ese es su tema, su exploración y aquello que lo motiva como artista. Pero como hay tanto arte en su mirada cínica de la vida y lo humano, se generan capas de estudio y desarrollo que suelen tener alma y corazón. Aunque claro está que es tan radical en ese sentido, que puedes conectar con su cine o rechazarlo con empeño. De relacionarte positivamente con él, termina siendo uno de los directores contemporáneos más valiosos, excéntricos y cautivadores.
Puede resultar increíble – pero es también algo bastante esperado en una sociedad conservadora y cucufata – que una película con alto contenido sexual y sensual (en términos del cine comercial) haya generado recelo y rechazo por esto. Tema que no es gratuito, sino pilar en el desarrollo de la historia y de su protagonista. «Pobres Criaturas» es una película sobre el feminismo, la libertad, la sexualidad y la importancia de abrazar estos principios. Además, y ya que seguimos con el tema «Barbie», la historia en la película de Yorgos, sus mensajes y textos, son similares al de la muñeca, pero mucho más inteligentes, mejores escritos, plasmados e interpretados. No hay comparación posible. No por acá.
Otro punto a destacar es el diseño de producción de «Pobres Criaturas». Fácilmente el más alucinante de las nominadas al Oscar. Se han creado, conceptualmente y luego de forma física, ciudades reales instaladas en un mundo ficticio y anacrónico. Todo es palpable, bizarro y extravagante. Y siempre cuaja en relación con el eje de la película, Bella. Eso sí, aprovechamos la ocasión para hablar de Jean-Pierre Jeunet y su cine, en el que claramente se ha apoyado el griego y su equipo de artistas. El director de “Amelie”, personaje bastante cercano al de Bella (con sus claras distinciones) tiene otra película que nos atrevemos a decir, sirve de inspiración para esta: “La Ciudad de los Niños Perdidos». Las referencias y homenajes son bastante obvios.
Finalmente, cerramos con Emma Stone quien se luce en una actuación que funge de terapia de artes expresivas, utilizando a su niña interna, aspecto animal, y mujer total. Exploración que seguramente la hará crecer como actriz (y persona) y cuyo personaje se llevará por siempre (como ella misma dice). Aplausos, que está impresionante.
Mark Ruffalo tambien está excelente en su personaje estrafalario y singular, pero la sorpresa llegó con la entrada en escena de Jerrod Carmichael y Christopher Abbot, la antes dupla de “A la de tres”, una de las mejores películas del 2021, que merece ser rescatada de la memoria y recomendada.