Dirección: Damián Szifrón
Guión: Damián Szifrón, Jonathan Wakeham
País: EEUU
Reparto: Shailene Woodley, Ben Mendelsohn, Jovan Adepo, Ralph Ineson, Richard Zeman, Dusan Dukic, Jason Cavalier, Nick Walker.
Damián Szifrón debuta en suelos estadounidenses y con un elenco hollywoodiense, años después de conseguir fama mundial gracias a la excelente “Relatos Salvajes”. El director argentino cae como anillo al dedo para esta historia misántropa y pesimista donde además demuestra bastante talento detrás de cámaras.
En “Misantropo” seguimos Eleanor Falco (Shailene Woodley), una joven policía que luego de su buena labor luego de un tiroteo en Baltimore es reclutada por el agente especial del FBI, Geoffrey Lammarck (Ben Mendelsohn). Juntos, tendrán que encontrar al asesino descubriendo al hombre detrás de este.
Es cierto que “Misantropo” cae en algunos puntos en común del género. La clásica dinámica problemática entre mentor y novato, el climax tenso en un espacio reducido, la burocracia y sistema que dificultan la operación, los problemas personales de los protagonistas con los que tienen que lidiar y un largo etcétera. Todo lo mencionado lo hemos visto realizado a la perfección en películas como “Seven” y “El Silencio de los Inocentes” o series como “True Detective” y “Mare of Easttown”. Eso sí, y aunque “Misántropo” no innova ni cambia las reglas del juego, las utiliza a su favor.
Detrás del juego de detectives y asesinos, “Misantropo” conversa sobre la complicada naturaleza humana y la sociedad corrupta, desde un punto de vista profundamente pesimista pero veraz. Al menos tangible. Estos comportamientos aberrantes y violentos, anárquicos o misántropos, Szifrón los llevó con brillantez y mucho humor en su anterior película “Relatos Salvajes”. Y en cuanto al género, es uno que conoce y en el que se ha embarcado repetidas veces. Por eso, aunque cambiando el tono por completo, es la mente ideal detrás de este proyecto.
Además, sorprende con una técnica prolija y una puesta en escena atrevida. Logrando una comunión entre una manera clásica de llevar a cabo este género, con chispazos modernos a través de algunos planos y secuencias sorprendentes. Hay bastante virtuosismo en el uso de la cámara y en cómo esta es usada para lograr un mejor y mayor impacto. Véase los momentos de respiro como el nado o el terrible evento en el centro comercial.
En épocas de blockbusters y cartelera dominada por “Transformers”, “Indy” y superhéroes, es todo un acontecimiento bizarro e inesperado, que una película como esta haya llegado a la pantalla grande y no saltado de frente al streaming. Y eso se debe tomar en cuenta y aprovechar, tomando en cuenta la notable e intensa experiencia que significa.
