Dirección: Jacques Audiard
Guión: Jacques Audiard
País: Francia
Reparto: Zoe Saldana ; Selena Gomez ; Edgar Ramírez ; Mark Ivanir ; Karla Sofía Gascón.
Nuestro primer periplo por Cannes fue inaugurado con “Annette”, el musical disruptivo de Leos Carax que nos daría la mejor bienvenida posible. Cuatro años después, Jacques Audiard estrena un musical a la altura de su predecesor, aunque menos iconoclasta en sus formas, igual de atrevido en su fondo. Y, también, excelente.
En “Emilia Pérez” seguimos a Rita (Zoe Saldana), una abogada quien luego de una victoria judicial, recibe una oferta laboral repentina, de la fuente más inesperada posible, para hacer algo totalmente impensado. (Mejor que las sorpresas lleguen al ver película).
“Emilia Pérez” es una bomba, que ha acuñado un nuevo subgénero que nunca en la vida se nos hubiera ocurrido: “narcotransmusical”. Así como lo lees. Y por más bizarro o extremo que suene, casi todo en él funciona. En buena medida gracias a que Audiard sabe cómo encarar temas a través de diversas miradas sin caer en facilísmos y en lo impostado. No se siente, como tantas veces ha pasado, pasa y pasará, que la mirada foránea de un director termina cayendo en lo trillado y en la exoticazión de realidades que no conoce. Palito muy fácil de pisar en una película como esta que pasea por tantos temas, situaciones y problemáticas complejas y sensibles de la sociedad mexicana (narcotráfico, la desaparición de personas, la violencia domestica, la identidad sexual, entre otros). Y no solo lo saca adelante, sino que lo logra con una lucidez insospechada. Con un atrevimiento que por momentos nos ha dejado perplejos. ¿Han dicho eso? ¿Acaba de pasar lo que pasó? ¿Que a Selena Gómez le qué?
A diferencia de musicales más rimbombantes y coloridos, con enormes números musicales y coreografías colosales, en “Emilia Pérez” Audiard se enfoca en el contenido de las letras y en un enfoque más intimo y minimalista. No a expensas de que varios de las canciones sean excelentes y que la banda sonora sea una que se desee escuchar en “loop”. Sin embargo, lo más interesante reside en que se haya utilizado el género para conversar de temas impactantes, complejos, polémicos y devastadores, a veces incluso con marcadas cuotas de comedia, sin caer en la falta de respeto o la minimización, todo lo contrario. Hay una extrañeza en cómo el mensaje llega, pero casi siempre aterriza bien. Arraigándose como lo deseaba.
La santísima trinidad en quien recae conseguir este efecto consiste de Zoe Saldana, excelente en su papel de abogada y cargando con la mayoría de números musicales (sobresalientes), en Selena Gómez (prepárense “Selenators”) que la actriz ha vuelto al cine para quedarse. Pero sobre todo en Karla Sofía Gascón, quien está magistral como el personaje que lleva el nombre del título, en diversas facetas y en una actuación a veces medida y por momentos exuberante. Que posiblemente le valga la Palma.
El mayor “pero” que le hallamos, es que sea una película en México pero que las actrices y actores sean de otras nacionalidades. Para nosotros no fue suficiente para perjudicar la película, pues esto se entiende al ser una producción extranjera y en la búsqueda de estrellas para su recorrido comercial. Además hay una explicación para los acentos marcados dentro de la trama.
Por ahora, ha sido la función de prensa con mayor ovación a su termino. Aún falta mucho y varios pesos pesados, pero “Emilia Perez” es la primera que, guste más o menos, se mete a la pelea por algún premio, incluida la Palma de oro.