El popular slogan “HBO, no es televisión” tiene quizás aún más relevancia hoy en día. Los que nos leen saben que consideramos que esta cadena de televisión estadounidense es la que tiene la valla más alta en relación a sus originales y estrenos. Esto no es nada nuevo. Cada año que pasa demuestra que mantiene la mano firme y el ojo audaz. Siempre tiene taquillazos y producciones alabadas por la crítica que luego pasan a ser premiadas. El 2020, con todo lo que significa, no es la excepción.
Dejando de lado su Streaming “HBO Max”, y algunas series que a lo largo del año han sido aplaudidas (sobre todo “I can destroy you”), la que nos compete hoy ha sido la última de una trinidad que nos ha acompañada en la última recta. Tres series que nos remontaron a aquellos tiempos, ¿lejanos?, donde debíamos esperar semana tras semana por un nuevo capítulo. Un problema para los ansiosos y los acostumbrados a la nueva normalidad, pero un premio nostálgico para aquellos, como nosotros, que siguen encontrando un placer especial en ello. Gusto que también se encuentra, por ejemplo, en “The mandalorian”. Primero nos tocó con “The third day”, luego con “We are who we are” y este fin de semana terminó con “The undoing”. Acá el slogan se cuestiona. ¿Hay algo más “televisión” que esto?
Sin embargo, y esto sucede sobre todo con sus miniseries, el slogan empieza a cobrar sentido cuando empezamos a ver un hilo conductor en sus propuestas. Estas se presentan como películas de 6, 8 o 10 horas de duración fragmentadas en episodios. No parecen series sino largometrajes que deben ser separados en capítulos para que el consumidor “aguante” y esté atrapado y necesitado de su cuota semanal.
Así, con las disculpas del caso que merece esta excesiva introducción, llegamos a “The Undoing”. Nuevo thriller de seis episodios (una hora cada uno), basado en la novela de 2014 You Should Have Known de Jean Hanff Korelitz; escrito y dirigido por David E. Kelley (Big little lies) y por Susanne Bier (Bird Box). Acá seguimos a Grace Sachs (Nicole Kidman), una reconocida psicóloga de Nueva York cuyo esposo (Hugh Grant) desaparece al mismo tiempo que sucede un hecho fatídico.
No haya nada más que se deba saber sobre la premisa. Es mejor así. Porque con esa premisa el espectador se vuelve jurado, víctima y detective de una historia que va colocando y quitando sospechosos, generando intriga y suspenso a su gusto y buscando giros, pasadizos sin salida y pensamientos morbosos. Nosotros, mientras vemos cómo suceden los hechos, generamos teorías y discusiones, muchas de las cuales no solo rebotan o se dan de llenos contra la pared, sino que nos avergüenzan o comprometen moralmente. ¿Por qué creímos eso? ¿de lado de quién nos ponemos? ¿cómo pudimos pensar esto otro? Preguntas y respuestas que, sobre todo en estos tiempos, se vuelven más relevantes. Pero por encima de las conclusiones, está nuestro maquinar. Nuestra humanidad. Nuestras creencias y moralidad. Incluso se creó un podcast para explayarse capítulo a capítulo.
“The Undoing” es convencional en sus formas. Es un thriller que juega con las reglas claras y obvias. Pero las usa a su favor. El público, necesitado de sorpresas y fantasmas, se olvida de aquello que está en sus narices. Los personajes de la serie también. Y fuera de la muy Buena dirección y el tratamiento de la imagen, con la difuminación en los bordes y que muchas veces empaña buena parte de la pantalla (como metáfora de la historia misma), el gran acierto está en el casting y lo mejor sucede con las actuaciones. El grupo de secundarios que merece el primer aplauso lo encabezan Noah Jupe (Henry Fraser), quien entrando a su adolescencia ya es prácticamente una estrella de Hollywood, Matilda de Angelis (Elena Alves), quien nos hacia recordar a Jennifer Lawrence, Édgar Ramírez (detective Joe), quien debería recibir más protagónicos y Lily Rabe (Sylvia Steineitz), que mereció más minutos en la pantalla. Pero yendo con los pesos pesados, Nicole Kidman (Grace Fraser) extraordinaria como siempre. Perfecta. Donald Sutherland (Franklin Reinhardt), cuya presencia es inigualable y se mantiene intacto a sus más de 90 años. Noma Dumezweni (Haley Fitzgerald), la mejor abogada que el dinero puede contratar. Finalmente, la sorpresa. Quien da el batacazo final robándose el show. Hugh Grant (Jonathan Fraser) en un papel que nunca le habíamos visto. Inolvidable. Seguramente le lloverán nominaciones (y premios).
The Undoing es una de las mejores series del año. Lamentablemente por estos lares tener HBO se ha vuelto un lujo y verla en estreno, cada domingo, uno mayor. Poca gente la ha podido disfrutar y conversar y esperamos que pueda llegar a más.